Ingresar a su ser querido en una residencia puede haber sido angustioso. Usted confía en el personal y en las instalaciones. Aunque haya intentado elegir la mejor residencia posible para su ser querido, no hay ninguna garantía real de que vaya a estar seguro y feliz.
Descubrir que un ser querido puede haber sufrido abandono o incluso malos tratos es horrible. Pero, ¿podría haberse evitado? ¿Qué formas de negligencia son las más comunes en las residencias de ancianos?
Tipos comunes de negligencia
La negligencia puede adoptar diversas formas en una residencia de ancianos. Estas incluyen:
Todos estos tipos de negligencia son graves y motivo de acción. Hay varias formas de detectar si un ser querido sufre o no negligencia. La desnutrición, las escaras, el mal humor, un entorno físico deficiente y las caídas, entre otros signos, son indicios de negligencia.
¿Cómo se puede prevenir?
La principal responsabilidad de prevenir la negligencia recae en las enfermeras y otros cuidadores que trabajan en el centro. Sin embargo, hay pocas maneras puede poner de su parte para asegurarse de que el centro cuida lo mejor posible de sus seres queridos.
Vigilar de cerca el estado físico del centro, organizar visitas "sorpresa" a sus seres queridos e investigar cuidadosamente el centro de antemano son formas de ayudar a proteger a sus seres queridos.
La negligencia es totalmente evitable y nadie debería sufrirla. Si sospecha que un ser querido está sufriendo negligencia o malos tratos en su residencia, puede ponerse en contacto con un abogado. Ellos pueden ayudarle a obtener justicia y a resolver la situación.
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