Causas habituales de los accidentes de tráfico

Sufrir un accidente puede plantear retos nunca vistos. Por ejemplo, los daños sufridos por el vehículo y las lesiones leves o graves.

Afortunadamente, todos los conductores pueden trabajar para reducir el número de accidentes que se producen en New Mexico. Una forma de empezar es analizar las causas de los accidentes. Ser imprudente, conducir bajo los efectos del alcohol, ignorar la señalización de los límites de velocidad y no tener cuidado en condiciones meteorológicas adversas pueden conducir a una colisión peligrosa.

Conducción distraída

Hay tres formas principales en las que un conductor puede perder de vista la carretera debido a una actividad que preocupa su atención. Se trata de distracciones que requieren la visión del conductor, como establecer contacto visual mientras habla con un pasajero; distracciones que requieren el uso de la mano del conductor, como enviar mensajes de texto, comer o cambiar de emisora de radio; y distracciones que requieren el espacio mental del conductor, como soñar despierto. Prestar toda la atención a la carretera puede significar literalmente la diferencia entre la vida y la muerte. Sólo se tardan unos segundos en recorrer una gran distancia.

Conducción bajo los efectos del alcohol

Probablemente no sea ninguna sorpresa que ponerse al volante bajo los efectos del alcohol o las drogas puede provocar un accidente muy traumático. Algunos efectos secundarios típicos del alcohol son el juicio nublado, la visión borrosa y la coordinación limitada, todas ellas formas de entorpecer el flujo normal del tráfico y crear una escena de emergencia. Por otra parte, puede resultar chocante oír que varios medicamentos recetados e incluso somnolencia también puede afectar a la conducción.

Exceso de velocidad y conducción temeraria

El exceso de velocidad y otras formas de conducción temeraria también son causa de muchos accidentes de tráfico. Dado que el exceso de velocidad aumenta la distancia de frenado de un vehículo, desobedecer el límite de velocidad sólo aumenta la posibilidad de que una persona sea incapaz de detenerse a tiempo cuando se encuentra con un peligro. Y conducir de forma descuidada, como dejarse llevar por la ira o saltarse las señales de stop, es una forma egoísta de conducir. Mirar sólo por ti mismo y olvidar que compartes la carretera te pone en peligro a ti y a todos los que te rodean.

Tiempo

Algo que está menos fuera del control del conductor son las condiciones meteorológicas imprevistas. Por ejemplo, la lluvia puede crear condiciones resbaladizas y reducir la visibilidad. Por lo tanto, es responsabilidad de los conductores controlar las condiciones antes de salir y detenerse si sienten que su seguridad está fuera de su alcance y en manos de la madre naturaleza.

Hay muchas otras formas en que los accidentes pueden desarrollarse de forma impredecible. Pero no importa qué acontecimientos le llevaron a usted o a un ser querido a convertirse en víctima de un accidente de tráfico, una indemnización justa podría estar a la vuelta de la esquina.